Dudas frecuentes
La respuesta corta es: no. En una consulta tradicional de nutrición siempre sales con un menú, es decir, con instrucciones de qué, cuándo y cuánto comer. Alguien más decide por ti y esto, a largo plazo, hace daño porque te desconecta de tus sensaciones y pierdes confianza en que tú puedes decidir. Al trabajar conmigo, una de las cosas que practicamos es reconocer qué necesitas comer, usando tus sensaciones físicas, tu experiencia, y tu conocimiento.
Si además de practicar estas habilidades, quieres ayuda para que entre l@s dos diseñemos una estructura de comidas que te haga las decisiones más fáciles en la vida diaria, eso sí lo podemos hacer.
No pongo dietas, no te digo qué tienes que comer, y enfocarnos sólo en el peso hace daño. Lo que sí podemos hacer es revisar tu historia con las dietas, los cambios de peso que has tenido a lo largo del tiempo, y ver qué cosas puedes hacer (o dejar de hacer) que pueden ayudar a sentirte mejor.
Por supuesto que sí puedes. No necesitas renunciar a tus ganas de bajar de peso para que trabajemos junt@s. No necesitas renunciar a nada. Eres bienvenid@ tal cual.
Depende de varias cosas: de la razón por la que quieres la consulta, de la cantidad de tiempo y recursos que tengas disponibles, y de qué tan profundo quieras explorar. Esto lo platicamos a detalle al final de nuestra primera sesión.
Depende de varias cosas. Algunas las mencioné en la pregunta anterior, pero también importa qué quieres tú. Yo te puedo sugerir, si quieres mi opinión, pero al final lo decides tú.
Para familias y criaturas:
Para menores de 10 años, hablo directamente con mamá y/o papá. Para mayores de 10 años, dependiendo del tema a trabajar, puedo tener sesiones sólo con mamá y/o papá, o también algunas sesiones mixtas.
Claro que sí. Probablemente tengamos que volver a revisar qué dijo el médico, las curvas de crecimiento y veremos qué dice la ciencia con respecto al crecimiento de lxs niñxs. Después de hablar de esto y tener el panorama más claro, ustedes podrán decidir qué quieren hacer.